El cambio climático y la tala de árboles de manera indiscriminada ocasionó que en los últimos años la producción de miel sufra un golpe importante en Yucatán, pues de 10 mil toneladas por año, apenas y se alcanzan las 6,500 en 2016, por lo que es necesario generar un plan de acción que ayude a impulsar la actividad apícola.
Así lo dio a conocer la directora de Abeja Planet, Nelly Ortiz Vázquez, en entrevista para Punto Medio, al mismo tiempo que anunció el evento “Semana de las Abejas en Yucatán”, el cual se llevará a cabo en mayo.
Detalló que este espacio está dirigido a empresarios, apicultores, autoridades de los tres órdenes de gobierno y público en general, con el fin de exponer la problemática que existe en la apicultura a fin de contar con posibles soluciones.
La Semana de las Abejas se realizará en seis municipios en una modalidad de conversatorio. Hasta el momento, Mérida y Valladolid serán dos de los participantes.
Baja producción el colmenas
La directora de Abeja Planet se dijo preocupada por la baja producción de colmenas en la península de Yucatán a causa del cambio climático.
Hace 50 años la producción por colmena alcanzaba los 50 kilos por año. Desde 2010 se redujo a la mitad. ¿Las causas? La presencia de huracanes y falta de vegetación. Actualmente existen cerca de 300 mil colmenas en el Estado que producen apenas 6,500 toneladas por año.
El ciclo apícola también ha sufrido cambios. La temporada iniciaba en diciembre con las enredaderas, el tajonal y por último, el dzidzilché, en junio. –Eran las tres plantas cosecheras más fuertes en el Estado, pero se ha perdido por el excesivo uso de agroquímicos –platicó.
Señaló que si no hubiera abejas en el planeta desencadenaría problemas para el ser humano que podría acabar con su vida. –Hay una expresión que se ha comentado: si las abejas desaparecieran de la faz de la tierra en cuatro años desaparecería la humanidad-.
Por lo anterior, urgió la necesidad de generar espacios de intercambio de conocimiento que aporten posibles soluciones ante un problema que está presente en Yucatán.
– Jesús Gómez
