¡Ni una más! Ni una menos! gritan mujeres en el Monumento a la Patria, tras darse a conocer dos feminicidios en lo que va del mes.
Varias mujeres protestaron este sábado en contra de la violencia feminicida que se ha presentado en Yucatán en los últimos 10 días, en donde por lo menos dos féminas perdieron la vida a manos de sus novios o parejas, y ya suman ocho los casos de feminicidios en el 2020.
“Alto a la violencia maldita”, se escuchó varias veces mientras se desplegó una manta de la organización Yucatán Feminicida.
La protesta se realizó a las 10 de la mañana y no tardó más de cinco minutos; se guardaron todas las medidas sanitarias, como la sana distancia y el uso de cubrebocas.
También gritaron consignas contra el Estado, las autoridades y los feminicidas, mientras se acompañaron por unos tambores para llevar la cuenta.
“¡Ni una más! Ni una menos!” gritaban desde las escalinatas del Monumento a la Patria ante los asistentes y automovilistas que pasaron por el lugar.
Ha trascendido en redes sociales que este domingo se realizará otra protesta en la que estarán los familiares de Fernanda G., la chica de 21 años que fue asesinada de dos balazos el jueves 20 de agosto por su novio Enrique N. H., en la colonia Residencial Pensiones.
En este caso el feminicida, tras cometer el atroz crimen, se suicidó en el techo de su casa con la misma arma de fuego.
Además del feminicidio de Fernanda, el pasado 25 de agosto, Norma, de 36 años y vecina de Villas de Oriente, en Kanasín, fue asesinada por su expareja, quien no ha sido detenido.
El macabro hallazgo fue realizado por su hija, Janete Reyes, poco antes de las 5 de la tarde de ese trágico día. Al parecer estaba desnuda y con huellas de violencia en la sala de su casa.
Ya son ocho los feminicidios en lo que va del 2020, superando los 7 del año pasado.
Los seis anteriores ocurrieron: el primero a finales de enero cuando cerca del ADO fue asesinada la francocanadiense Henrietta por su esposo Jean Paul L., de 76 años de edad.
El segundo y tercero lo cometió Sergio N. V. en febrero, cuando asesinó a su madre Leticia del Socorro Villanueva Uribe y a su abuela Ana Felicia Uribe Madera, de 88 años, y todo porque no le daba dinero para pagar sus vicios.
Fueron halladas estranguladas en su domicilio ubicado en la calle 19-B No. 100 K entre 16 y 18 del Fraccionamiento del Arco.
El cuarto ocurrió en marzo; por “celos enfermizos” José Enrique Y. Ch. le ocasionó traumatismo requimedular a su mujer Suemy del Socorro Yam Canché, quien el martes 24 de ese mes murió en el Hospital Agustín O’Horán.
El quinto feminicidio fue en mayo en Umán, cuando Ariani Yazmín Collí, de 22 años de edad, fue asesinada por su expareja Gabriel Humberto A. P., luego de que éste la citara para “tratar de reiniciar su relación sentimental”, ya que una semana atrás se separaron.
El junio asesinaron a Irlanda, de 36 años de edad, y su cuerpo fue abandonado en Ciudad Caucel, pero hasta ahora no se sabe quién o quienes la asesinaron.
Texto y foto: Esteban Cruz Obando
