La activista Adelaida Salas Salazar exhorta a las autoridades a atender el caso de una joven de la Universidad para el Bienestar Benito Juárez García de Ticul, plantel inugurado por AMLO
La representante del Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidios en Yucatán, Adelaida Salas Salazar, hizo un llamado a las autoridades para que atiendan el caso de una joven estudiante de la Universidad para el Bienestar “Benito Juárez García” de Ticul, quien sufre acoso por parte de otro estudiante de ese plantel.
Señaló que a pesar de que esta joven ha denunciado a su agresor, las autoridades de esa universidad han hecho caso omiso, pues no cuentan con un protocolo de seguridad, por lo que únicamente le han dicho que acuda a la Secretaría de Educación del Estado para reportar lo que sucede.
“Es lamentable que las estudiantes estén expuestas a hostigamientos y acoso por parte de estudiantes e incluso maestros, y que el personal de este plantel no haga algo al respecto”, manifestó.
Indicó que a pesar de que la joven ya acudió a la Segey a denunciar este caso, hasta el momento no han hecho nada, ya que sigue conviviendo con su agresor con el temor de que pueda violentarla.
Salas Salazar informó que han solicitado una cita con el delegado de la Secretaría de Bienestar Social, Joaquín Díaz Mena, para plantearle este problema; sin embargo, hasta este viernes no les habían dado una respuesta.
Dijo que esta situación no solo se da en escuelas públicas, sino también en las privadas en donde constantemente las mujeres son víctimas de abuso y acoso; por lo que la marcha del 9M fue un parteaguas para que las estudiantes denuncien y se expongan estos casos.
Asimismo, destacó que es necesario que todas las escuelas cuenten con un Protocolo para la Prevención, Atención y Sanción de la Violencia de Género, Discriminación, Hostigamiento, Acoso y Abuso Sexual para que se expongan estos casos, y se les sancione a los que cometan estas faltas.
“Algunas alumnas que son víctimas no saben qué hacer puesto que las instituciones en las que estudian no cuentan con un protocolo para darle seguimiento a esta problemática”, subrayó.
Finalmente comentó que estas nuevas generaciones ya no están bajando la cabeza, y ahora están denunciando porque ya están hartas; sin embargo, ahora el Gobierno es el que no responde.
Texto: Georgina Bacelis
Foto: Agencia
