Los esposos fueron víctimas de un fraude simulado, por lo que perdieron su vivienda ubicada en Montes de Amé a manos de un abogado
Gabriel Noh Chí y su esposa, Basilia Pool Couoh, son muy afortunados, ya que se puede decir que son de las pocas personas que se salvaron de ser víctimas de agiotistas y malos abogados, que aprovechándose de la necesidad y de la falta de recursos para contratar una defensa legal, terminan despojando a las personas de sus casas a raíz de un préstamo por cantidades pequeñas.
Lamentablemente estos casos son muy comunes y pocos tienen un final feliz como ahora ocurrió con estos adultos mayores que después de dos meses de ser lanzados a la calle, este sábado regresaron a su vivienda ubicada en Montes de Amé.
Al respecto, Gabriel Noh, de 74 años de edad, recordó que para apoyar a su nieto Óscar a obtener un crédito por 11 mil o 15 mil pesos, accedió a ser aval al igual que su esposa, pero resultó que nunca supieron que era lo que estaban firmando, por lo que a final de cuentas fue la venta del predio, que por estar ubicado en una zona en la que se fueron asentando poco a poco casas de tipo residencial, alcanzó una alta plusvalia
La humilde vivienda que habitan Gabriel Noh y Basilia Pool desde hace 37 años alcanzó un avalúo de tres millones de pesos, así es que se convirtió en un apetitoso bocado para la mafia inmobiliaria que hizo todo lo necesario para quedarse con ella y para ello hasta consiguieron firmas de la suplente del notario público Número 94 con sede en Tizimín, la abogada Maria José Bolio.
Así lo explicó la señora Ana María Ancona Teigell, quien conoció del caso por una amiga que le pidió su intervención para ayudar a los abuelitos, que resultó que firmaron la venta de su predio por la supuesta cantidad de 2.5 millones de pesos al abogado Rubén Osorio Pacheco. Más adelante los elementos de la Fiscalía averiguaron que nunca se le entregó cantidad alguna a los esposos, quienes pasaron dos meses “encomendados” con un familiar.
Resultó que el abogado declaró que realizó parte del pago en efectivo y otra en cheque, pero al seguir la pista del documento en el banco, se supo que no se pagó nunca y que además carecía de fondos.
Así es que tremenda fichita resultó este licenciado que fue el que dio el préstamo al nieto de los afectados, quienes durante los dos años que tardó el juicio que concluyó con el desalojo, sufrieron de muchos problemas de salud al grado que Basilia Pool, de 72 años, estuvo a punto de sufrir una embolia.
Ancona Teigell agradeció el apoyo del gobernador Mauricio Vila Dosal y de la Secretaría de Gobierno, María Fritz Sierra, quienes dieron las indicaciones para atender el caso que concluyó con una mediación por lo que propiamente con la devolución del predio cuyo título ya estaba inscrito en el Registro Público de la Propiedad a nombre del abogado, quien por cierto todo parece indicar que no recibirá castigo por sus actos, ya que según se explicó, fue parte del arreglo.
Finalmente la señora Ancona Teigell pidió a la ciudadanía tener cuidado con este tipo de situaciones ya que los fraudes simulados están a la orden del día. “La situación económica está difícil, hay muchos casos que no salen a la luz, hay que levantar la voz para hacerlos visibles, contamos con el apoyo del Gobierno para evitar que se comentan injusticias”, puntualizó.
Texto y foto: Manuel Pool
