EDITORIAL

La decisión de los diputados del Congreso local de aprobar a medias el plan de contingencia del Gobierno del Estado, no sentó nada bien en el sector empresarial, y en el marco de esta molestia surgió una frase que es digna de tomar en cuenta y que, en cierto modo, es un sentir que en muchas ocasiones ha manifestado la sociedad.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial en Yucatán, Michel Salum Francis, señaló que los diputados han decepcionado a la iniciativa privada, ya que pidieron una reunión con todos los legisladores para explicarles las condiciones en las que se encuentra el sector y porque necesitaban el apoyo de reactivación económica, pero nunca quisieron atenderlos.

En este marco, Salum Francis señaló lo siguiente: “Pero en campaña sí que quieren que los escuchemos, que les abramos las puertas y hasta que los apoyemos con nuestros recursos”. Es una declaración fuerte, pero que además suena como advertencia a todos estos legisladores que es muy probable que busquen reelegirse.

Esto es muy parecido cuando la ciudadanía le reclama a sus legisladores que nunca regresan por sus distritos, salvo cuando quieren volver a obtener su voto y además es un llamado de atención a todos aquellos que quieran obtener un puesto público, ya que si bien es posible que hayan sido completamente sinceros en su voto, también es verdad que el no haberse querido reunir con el sector empresarial es un error que puede terminar costándole en un futuro.

 

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