El centro ya no es de los meridanos

De acuerdo con la empresa especializada en consultoría inmobiliaria Uno Consulting, casi el 50 por ciento de la vivienda del primer cuadro de la ciudad se encuentra en propiedad de extranjeros y gente de otras partes del país.

Esto, ante los altos costos que hoy representa el mantener una vivienda en esta zona, considerada el corazón de la ciudad de Mérida, y donde es más evidente, según Cristian Canto Villanueva, director de la compañía, es en el rumbo aledaño al Paseo de Montejo y los costados nororiente y norponiente del centro.

“La dinámica de vivienda hoy en la ciudad nos muestra que el 38 por ciento de las mismas, en los primeros cuadros, de la ciudad, pertenece ahora a extranjeros radicados en la capital y otro 10 por ciento a población de otras entidades del país”, dijo el especialista.

Lo anterior se debe a los altos costos que representa el mantenimiento de la infraestructura de la vivienda antigua o colonial, y solo la inversión extranjera o de otros puntos del país con mayor ingreso económico pueden solventarlos.

Aunado a ello se suma el hecho de que otros predios se encuentran en abandono o en manos de consorcios empresariales, por lo que el término “vivienda” en el centro histórico de la ciudad se reduciría a poco menos del 30 por ciento de esta zona.

Existen registros de precios de viviendas no colonial que hoy se oferta en zonas como en la colonia Vicente Solís, con valor de hasta 1.6 millones de pesos. Y otras en el primer cuadro de la capital, de más de cuatro millones de pesos, lo que hace altamente costoso que un meridano pueda adquirir estos predios.

“Además de eso tenemos que el 70 por ciento de la oferta de vivienda del norte, es adquirida por habitantes que han llegado de otros puntos del país, y que adquieren predios a costos superiores a lo que un trabajador promedio local puede pagar”, aceveró Canto Villanueva.

Esto deja un promedio de 80 por ciento de vivienda adquirida por medio del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), por el trabajador promedio local principalmente, que hoy ha sido “expulsado” a la periferia de la ciudad, en zonas como Ciudad Caucel, Juan Pablo II y Kanasín, entre otros puntos.

El impacto de la adquisición de vivienda por extranjeros en los primeros cuadros de la ciudad también ha generado nuevas dinámicas de convivencia. Por ejemplo, como ha sido expuesto por Punto Medio, los residentes internacionales son quienes promueven la queja por el “ruido” de la zona del centro histórico a altas horas de la noche, cuando anteriormente esto no representaba problema alguno.

De acuerdo con Canto Villanueva, esto se suma a que desde hace dos años el desarrollo de vivienda en Yucatán se ha consolidado, lo que enmarca el incremento no solo de la oferta de casas de condición social, sino de la vivienda “premium” valuada entre 2.8 y más de 4.5 millones de pesos.

“Yucatán, su capital tiene ya desde hace un par de años una popularidad de estar entre las primeras 10 ciudades como mayor ciudad de atracción de inversiones y en estos momentos ocupa la posición número seis”, acotó.

Destacó que en la ciudad, hay poco más de 110 mil personas, con capacidad de ingreso de entre 110 mil y 250 mil pesos mensuales, quienes representan el nueve por ciento de la población local, con cerca de 35 mil familias, que cuentan con un tipo de vivienda considerada “plus” o “premium”.

Esta inversión se estima que proviene principalmente de capital, entre extranjero y nacional. Es decir, entraría dentro del 70 por ciento de la oferta adquirida por propietarios no locales.

Texto: Iván Duarte
Fotos: Amílcar Rodríguez

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