La ANTIGÜEDAD DE LAS TUBERÍAS en la ciudad, que en muchos años es mayor a los cincuenta años es causa de que por diversos rumbos de la ciudad aparezcan fugas, aún en las calles recientemente reconstruidas por el ayuntamiento, cuyo presidente municipal Mauricio Vila, considera que no hay mala voluntad o dolo por parte de las brigadas de la Japay para hacer la reparación en tramos dañados.
“No creo que haya dolo, evidentemente cuando uno está realizando tantos trabajos por toda la ciudad, a veces se repavimentan las calles y desafortunadamente en un tiempo posterior resulta que hay una fuga de la Japay, pero creo que hay una buena coordinación, y esperamos seguir contando con su apoyo para que las fugas que se vayan dando no solamente en los tramos nuevos sino en toda la ciudad, se vayan atendiendo de la manera más pronta posible”, indicó.
Un ejemplo de los perjuicios que se ocasionan con estas situaciones, es la ocurrida a los vecinos de la calle 16 del Fraccionamiento Fidel Velázquez, donde en la calle recién pavimentada aparecieron dos fugas, que tardaron en ser atendidas por la Japay, por lo que tuvieron que esperar más de 8 días para que la reconstrucción finalice, por lo que recibieron el año en medio del polvo y el lodo.
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