Roberto Dorantes
robertodorantes01@gmail.com
La fe es seguridad de lo que se espera, y prueba de lo que no se ve. Estar preparados porque a la hora que menos piensen, viene el Hijo del Hombre.
Estas frases de las sagradas escrituras me llevan a reflexionar sobre la relación de la fe y el tiempo, me he replanteado que es el tiempo, cómo influye el tiempo en nuestras vidas, sobre la incertidumbre del futuro que desconozco.
La definición del tiempo se puede ver de distintas perspectivas, Aristóteles define el tiempo como el número del movimiento según el antes y el después; hasta las ciencias modernas han tratado el tema del tiempo, como la física relativista y la mecánica cuántica, hablan sobre la flecha del tiempo, en la relación de una medición de la materia. Esto indica una cosa que el tiempo siempre ha intrigado al hombre, el tiempo es tan antiguo y tan nuevo.
Heidegger identifica el tiempo con el ser, como la existencia del ser ahora, que permanece y fluye continuamente en el porvenir; estas consideraciones arrojan luz sobre el tiempo, el tiempo se da en una realidad existente, mide a la duración de los seres, esta filosofía podemos aplicarla con nuestra existencia y relacionarla con la fe.
La fe nos indica una espera sobre la venida del Hijo del Hombre, es decir, el regreso de Cristo que vendrá a juzgar a vivos y a muertos, esto se dará en nuestra dimensión temporal, la fe nos da la certidumbre que sucederá esto, no nos indica el día y la hora, por eso nos invita a prepararnos para ese día; como cuando el maestro de la clase invita a sus alumnos a estudiar, porque les indica que hará un examen sin decirles el día que lo aplicará, los alumnos prevenidos estudiaran para que no los tome de sorpresa, mientras los alumnos indiferentes se lamentarán el día de la prueba a pesar de conocer las indicaciones del maestro.
Se habla del fin del mundo, todos hemos escuchado el día del juicio final, sin embargo, pocos se preparan para ese acontecimiento que es seguro de ha de llegar; por eso fe y tiempo están estrechamente relacionados, independientemente del día del juicio final, todos sabemos que nuestra vida presente llega a un término; así como vivimos hemos de morir, no hay nadie que se escape de la muerte, el día nos ha de llegar y qué hacemos al respecto, cómo aprovechamos nuestro tiempo, vivimos por vivir o vivimos comprometidos con nuestra realidad efímera y mortal, hemos pensado que hay después de la muerte, existirá el tiempo después de la muerte o llegaremos a una eternidad que ya no podremos cambiar.
