Los Barrachano: familia ligada a gobernantes, promotores turísticos cineastas

Miguel fue cinco veces gobernador de Yucatán entre 1841 y 1853 y se le considera protagonista del movimiento separatista de la Península

En 1775, Yucatán era una provincia de la Nueva España, y su territorio abarcaba al actual estado de Campeche, y fue en ese año y lugar en el que nació Manuel Antonio Barbachano González del Villar, quien en 1805 contrajo matrimonio con María Josefa Tarrazo Casaña.

Fueron siete los hijos de estos esposos, destacando Miguel y Manuel Antonio, el primero fue cinco veces gobernador de Yucatán entre 1841 y 1853, y a quien se le considera como uno de los protagonistas de los procesos separatistas de la Península del resto  del país, mientras que el segundo se graduó de abogado en Valladolid, España, y hasta fue alcalde de Gijón. De regreso a su tierra fue diputado federal y senador por Yucatán, pero también se le recuerda como un poeta costumbrista y cuyos versos inéditos se publicaron en la Revista Salón Literario.

Uno de sus hijos, Fernando Barbachano Domínguez, contrajo matrimonio con Ana Bolio Manzanilla, con quien procreó una decena de hijos, de los cuales Desiderio Fernando y Manuel, fueron quienes tuvieron una descendencia que cada una en sus respectivos ámbitos, el turismo y el cine, se dedicaron a promocionar y a enaltecer a Yucatán por todo el mundo.

Fernando Desiderio se casó con Elia Peón Cisneros y uno de sus hijos fue el famoso Balam, quien es reconocido como pionero en la promoción del turismo arqueológico y cultural de Yucatán.

En 1917, el entonces muy joven Fernando Barbachano Peón, viajó a  Nueva York, en el Barco “México” perteneciente a la naviera Ward Line, empresa que posteriormente le permitiría subir a sus embarcaciones cuando llegaban a Progreso para ofrecer a los viajeros recorridos por las selvas de Yucatán.

EN 1917, Fernando Barbachano Peón viajó a Nueva York y logró un convenio para ofrecer a los viajeros recorridos por las selvas de Yucatán.

En 1921 inicia la compra de terrenos en Chichén Itzá, lugar en el que tras convencer a los Rockefeller y a los Carnegie de que financiaran excavaciones arqueológicas, logr que le permite la reconstrucción del sitio, donde en 1923, después que Carrillo Puerto construyó la carretera Dzitás-Chichén Itzá, en asociación con su suegro, el fotógrafo español Francisco Gómez Rul, la construcción del Hotel Mayaland.

Posteriormente, él continuaría la del Hotel Mérida en 1940; en 1950 fundó el Hotel Hacienda Chichén, dirigió la construcción del Hotel Posada Uxmal en 1953, del Hotel Hacienda Uxmal en 1956; reconstruye el Hotel Playa de Cozumel en 1957; El Isleño en 1961, y en 1963 el Hotel Cozumel Caribe, y finalmente adquiere el control de la operación del Hotel Panamericana.

En junio de 1964, entregó la dirección de sus negocios a su hijo Fernando Barbachano Gomez Rul, conservando la posición de consejero y dedicando su tiempo a la defensa de los bienes patrimoniales de Yucatán, siendo ésta su obra predilecta. La estafeta pasó luego a su nieto Fernando Barbachano Herrero y sus bisnietos Fernando y Eugenio Barbachano Losa.

Los primos del Jaguar fueron los hermanos Manuel y Miguel Barbachano Ponce, quienes fueron prolíficos en la industria cinematográfica en México con reconocimiento a nivel mundial y de quienes hablaremos  en la próxima entrega.

Texto: Manuel Pool

Fotos: Cortesía

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