Segunda Plana

HACE MUCHOS AÑOS, los carniceros del interior del estado podían sacrificar los animales cuya carne iban a vender, en el suelo de las plazas principales de los diferentes municipios, prácticamente sin ninguna medida de higiene; pero las cosas han cambiado y ahora se exige que esa tarea se realice en espacios adecuados y que haya un mínimo de medidas de limpieza. Algo similar ocurre ahora con la cría de cerdos, una actividad sumamente contaminante, que agrede directamente al manto freático, como ha advertido muchas veces el secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Eduardo Batllori Sampedro, quien ayer convocó a los medios de prensa para responderles todas las preguntas que quisieran hacerle respecto al caso de Homún, que ha enfrentado a quienes viven del turismo que visita cenotes con los inversionistas que quieren instalar una granja porcícola con cupo para 23 mil cerdos. Todos tenemos que entender que ya no se puede permitir que la producción de carne de cerdo se realice contaminando de manera severa nuestras reservas de agua.

AUNQUE SE LE reconoce a Batllori Sampedro una forma de hablar clara y un desempeño vertical como funcionario, hay que darle una ayudadita y señalar que de nada van a servir la protesta de los cenoteros de Homún y el acatamiento de las leyes que haga la empresa que impulsa el proyecto de la polémica granja, si no se trabaja en la educación ecológica de los habitantes del interior del estado. Todos deben entender que los viejos pozos cuya agua bebíamos hace 30 ó 40 años ya no pueden ser utilizados como sumideros, y que las actividades productivas que se realicen en el campo tienen que hacerse cuidando la tierra, el aire y el agua de los cuales vivimos. La ignorancia no exime del cumplimiento de la ley, y los ciudadanos tenemos que asumir una conducta ecológica por iniciativa propia, no porque nos obliguen las leyes. En Yucatán todavía hay reticencia y molestia de empresas o inversionistas cuando se les dice que para autorizarles algún proyecto tienen que presentar la correspondiente Manifestación de Impacto Ambiental. Pero el cuidado del medio ambiente debe formar parte importante de nuestra conducta ciudadana.

 

Por Gínder Peraza

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