A CUATRO MESES de iniciar la temporada de huracanes para el Atlántico, el pronóstico no es nada alentador. Según reportes preliminares, este será un año de gran actividad, superior a la registrada en 2017. Se esperan 16 tormentas tropicales, de las cuales ocho son huracanes, y de estos, cuatro alcanzarán categorías de tres a cinco.
De acuerdo a la agencia Oscilaciones Climáticas Globales (GWO por sus siglas en inglés), la temporada de huracanes tendrá una importante actividad, incluso más fuerte que la del año pasado poniendo en peligro al Caribe y a los Estados Unidos. La agencia, considerada una de las más certeras del mundo, ya emitió su primer pronóstico para la 
Temporada de Huracanes para el Atlántico que inicia el próximo primero de junio.
Para muchos sería adelantado hablar sobre un pronóstico, sobre todo por los frentes fríos que se han registrado; sin embargo, entre las razones por la cual se emitió este primer pronóstico, explica la agencia, es porque las temperaturas oceánicas del Atlántico continúan más calientes de lo normal en su mayoría, incluyendo el Mar Caribe y el este de los Estados Unidos, muy similar al año pasado.
De igual forma, se espera que el centro de la alta presión de Bermudas-Azores vuelva a estar en una ubicación favorable muy similar al año pasado, favoreciendo una ruta mayormente al oeste de los sistemas tropicales que se desarrollen en el Atlántico tropical, lo que pone en peligro mayor al Caribe y los Estados Unidos.
De los fenómenos proyectados, se estima que cuatro huracanes azoten en los Estados Unidos, de los cuales dos probablemente serán huracanes de gran impacto, así como existir la posibilidad de que seis tormentas con nombre toquen a Estados Unidos.
Se espera que durante abril y mayo se emitan los pronósticos oficiales.
Durante el 2017, el primer ciclón formado fue Arlene el 19 de abril (mes y medio antes de que inicie la temporada) y el último, Rina, el 9 de noviembre.
Jesús Gómez
Fotos: Cortesía
